Que nuestro amor vibre por siempre

 

Febrero mes de amor, ¿El amor tarde o temprano llega a su fin, o es como la materia no se destruye solo se transforma?

Les comparto que por experiencia propia el amor si llega a su fin, definitivamente no sé exactamente cuándo ocurre esto en las parejas, sería genial saber el momento preciso cuando la magia se desvanece y todo el encantamiento desaparece.

En una relación aprendes que las palabras se las lleva el viento y que los hechos son los que van midiendo cómo se encuentra y en dónde está parada una pareja. 

¿Cómo es posible que el amor a través de los años deje de brillar y se convierta en la sombra del cúmulo de todos aquellos recuerdos que vivimos acompañados con nuestro “ser amado”? No tengo una respuesta sabia a esta pregunta, lo que sí tengo claro es que TODO en esta vida cambia; Incluso la manera de vivir, percibir y disfrutar el amor, después de la primera etapa del enamoramiento, se pasa a una de compañerismo y consolidación, donde los novios se conocen más y se comprometen más. Luego pueden pasar a la compatibilidad, donde se experimenta un cambio radical en la rutina de ambos y que puede resultar en un crecimiento y avance de la relación o el fin de ella. Pero estos cambios siempre están ahí, pareciera que su papel es estar recordándonos que nada es estático y que todo está girando como las manecillas del reloj.

En mi caso yo tomé la decisión de dar el siguiente paso en el enamoramiento llevábamos apenas tres meses, que aquí va una fuerte confesión yo no sé si en verdad estaba enamorada o fue algo nuevo que me cautivo, en realidad no me di la oportunidad de que esta relación experimentara las etapas del amor, creo que solo di el salto sin pensar en las consecuencias de un futuro ya que como bien sabemos cada una de las etapas supone un avance en el que se experimentan nuevas cosas y se dejan atrás otras y cuando uno no deja que las cosas fluyan a su tiempo y a su manera lo único que logramos es romper desde un inicio la liga que mantiene algo unido.

En realidad a lo largo de mi relación mi inexperiencia y mi lucha de poder con mi mamá me llevo a quitar por completo la liga y cerrada de ojos aventarme al abismo, ustedes conocen muy de cerca mi historia y sabe por todo lo que tuve que haber pasado para poder estar hoy sentada escribiendo un nuevo artículo de Mujer de hierro, en mi caso el amor nunca se acabo, en realidad nunca existió, por mi mente varias veces pasó que esa relación no tenia aroma ni sabor a amor, siempre tuve la sensación de que era por compromiso y por el deber ser y eso al final nos llevó a tomar caminos completamente diferentes, lo “intentamos” créanme que puse todo de mi parte pero me alcanzó el cansancio y el fastidio de no recibir lo mismo a cambio, haciendo memoria lo que me rompió en dos partes fue sentirme NADA a su lado y el ver en su mirada un gesto de desprecio, fastidio y enojo hacia mi. 

Recuerdo que un 14 de febrero donde las cosas ya no estaban nada bien llego a casa y colocó en mi almohada una cajita muy linda, sin decir nada hizo contacto visual conmigo asentó su cabeza y di por hecho que ese regalo era para mi, en verdad me sorprendió por que desde hacia ya tiempo había perdido el encantamiento de ese día que años atrás para mi era la locura, me encantaba pues deben saber que era sumamente cursi. No tome de inmediato la cajita, me di mi tiempo y cuando él salió de nuevo al trabajo la tome y la abrí, dentro de ella había un hermoso anillo del cual colgaban mucho corazones pequeños color rojo en verdad fue un lindo detalle, al ponérmelo y por curiosidad me fije dentro de la argolla y estaba grabada una linda frase “que nuestro amor vibre por siempre” no dije nada y me puse el anillo en realidad me encantó, después de algún tiempo le pregunté qué quería decir la frase del anillo y ¡Oh sorpresa! no sabía que existía, ilusa de mí creí que él la había mandado a grabar, ¿saben algo? ese anillo aun existe lo tengo guardado para Lia, se que algún día lo querrá llevar puesto como símbolo del amor que su padre y yo siempre le tendremos.   

Así que en definitiva el amor algunas veces se transforma, en otras más se aniquila pero al final de la vida a eso venimos al mundo a amar intensamente; En el camino nos toca sufrir, gozar y disfrutar de él, así que hagámoslo con todas nuestras fuerzas no olvidemos que el amor es un lenguaje que se acompaña de mucha locura y como dice Mafalda:  Vive la vida a tal grado de que siempre estés despeinada porque saben algo el amor verdadero y la pasión que éste conlleva al final siempre te trae de cabeza. 

No caigamos nuevamente en el enorme error de ansiar tanto ser amadas que confundamos este hermoso sentimiento. No caigamos en impresiones impostoras que nos llevan a perder la ganas de volver a entregar todo y amar. 

Empieza poco a poco si tu corazón está partido en dos,  comienza tu nuevo camino creando, cultivando y cuidando tu amor propio, desde ahí empiezas a forjar los cimientos para poder disfrutar del amor en compañía.